martes, 24 de octubre de 2017

SUSOS O XUXOS


El suso (a veces también chucho o susú, del catalán o xuxo) es un pastel dulce típico de Gerona (Cataluña - España) consistente en una masa fina de forma cilíndrica rellena de crema, frita y azucarada por fuera.

Cuenta la leyenda que en la Rambla y la calle de Platería se encuentra un personaje muy simpático que forma parte de las leyendas de Gerona, el Tarlà, personaje a quien se debe el origen del suso. Este acróbata, que entretuvo a los ciudadanos en una época de cuarentena durante una epidemia, se enamoró de la hija de un pastelero. Durante una visita a su enamorada, cuando el padre de ella llegó, se escondió dentro un saco de harina hasta que estornudó haciendo «xui-xui». Para no enfurecer al pastelero, le prometió casarse con su hija y darle la receta de un dulce: el suso, denominado así en recuerdo del estornudo delator. Ahora puede verse el muñeco del Tarlà cada año por las fiestas de primavera o por feria, cuando se cuelga en el mismo lugar donde años atrás entretuvo con sus acrobacias a los gerundenses.

El suso o chucho está presente en muchos lugares fuera del Gironés y alrededores gracias a su gran aceptación. En la segunda mitad del siglo XX era uno de los principales productos vendidos en las churrerías.

Yo he adaptado la receta un poco a mi manera, y he conseguido un suso esponjoso y que dura varios días tierno. Espero les guste.




Ingredientes para 12 susos:

-250 gr de harina de repostería 
-125 gr de harina de fuerza 
-2 huevos 
-110 ml de leche 
-100 gr de mantequilla 
-7 gr de levadura fresca de panadero o 2 gr de levadura seca
-25 gr de azúcar 
-25 gr de azúcar invertido 
-1 cucharada sopera de agua de azahar 
-ralladura de 1 naranja mediana 
-ralladura de 1 limón mediano 
-1 pizca de sal 
-aceite de oliva suave para freír o de girasol 

Ingredientes para la crema pastelera:

-1 yema de huevo L
-250 gr de leche 
-40 gr de azúcar 
-15 gr de maizena 
-1 cucharadita esencia de vainilla 
-1/2 cáscara de un limón o naranja 
-1/2 canela en rama 

Preparación de la crema pastelera: 

Debemos tener la crema pastelera hecha horas antes o el día anterior para que coja consistencia. La ponemos en una manga pastelera. 

Reservamos un poco de leche para diluir la maizena, el resto la ponemos a fuego suave, junto a la canela, esencia de vainilla y cáscara de limón, para que coja el sabor de los ingredientes hasta que hierva. 

Mientras batimos la yema con el azúcar. Una vez montada añadimos la leche en la cual habíamos disuelto la maizena, mezclamos bien. 

Retiramos del fuego. Echamos unas cucharadas de leche en la yema, removemos bien. Incorporamos el resto de leche y mezclamos. Ponemos nuevamente al fuego hasta que la crema espese sin dejar de remover, pues se puede agarrar al fondo. Dejamos templar, metemos en una manga pastelera y dejamos enfriar guardada en el frigorífico.

Preparación de los susos:

Ponemos las dos harinas juntas en un bol y mezclamos bien. Retiramos 100 gr de esta harina y reservamos. 

A continuación templamos la leche, disolvemos en ella la levadura y mezclamos en el cuenco con los 100 gr de harina que tenemos reservada. Si ponéis levadura seca, añadir directamente a la harina. Dejamos reposar hasta que duplique el volumen y tenemos una masa madre.

Transcurrido el proceso, incorporamos en un bol o procesador de alimentos, el resto de harina, en el centro los huevos, la mantequilla derretida, el azúcar, el azúcar invertido, el agua de azahar, las ralladuras de los cítricos, la pizca de sal y por último la masa madre. Amasamos a mano o en el procesador de alimentos, dejando una masa fina. 

Dejamos fermentar en el mismo bol, tapado con papel film hasta que doble su volumen. 

Pasado el tiempo, espolvoreamos la encimera de harina, espolvoreamos el rodillo y la masa si fuese necesario. Estiramos la masa con el rodillo dejandola fina y cortamos a cuadros de 14x10 cm. Con los recortes que queden, vamos juntando, estirando la masa, y recortando para hacer nuevos bollos y así hasta terminar la masa.


En ellos vamos poniendo con la manga una tira de crema pastelera sin llegar al borde. 


Doblamos los laterales para adentro.


Plegamos la masa, sellando bien los bordes con pellizquitos para que la crema no se salga. Rodamos para dar forma de cilindro.


Colocamos los bollos sobre la encimera enharinada o sobre de papel de hornear. 


Tapamos con un paño limpio y dejamos reposar 30 minutos. Ponemos abundante aceite, freimos a fuego bajo para que se hagan bien los susos por dentro y no se quemen por fuera, ya que tienden a freirse enseguida.

Sacamos, escurrimos en papel absorbente para quitar el exceso de aceite y rebozamos en azúcar. Dejar enfríar, envolver en papel film para mantener tierno más tiempo.

Si preparáis más cantidad, se pueden congelar y sacar un rato antes de consumirlos y están como el primer día de tiernos.

En thermomix:

Preparación de la crema pastelera: 

Debemos tener la crema pastelera hecha horas antes o el día anterior para que coja consistencia. La ponemos en una manga pastelera. 

Ponemos la leche en el vaso, añadimos la canela en rama, la esencia de vainilla y cáscara de limón. Calentamos para infusionar la leche, 10 min, 90º, vel 1. Dejamos enfriar la leche. La colamos con un colador y procedemos a utilizarla.

Ponemos en el vaso la leche, añadimos el resto de ingredientes, la yema, maizena y azúcar y programamos 7 min, 90º, vel 4. Dejamos templar, metemos en una manga pastelera y dejamos enfriar guardada en el frigorífico. 

Preparación de los susos:

Ponemos las dos harinas juntas en un bol y mezclamos bien. Retiramos 100 gr de esta harina y reservamos.

Ponemos en el vaso la leche y calentamos 1 min, 37º, vel 1.
Agregamos la levadura y los 100 gr de harina que tenemos reservada y mezclamos 20 seg, vel 4. Si ponéis levadura seca, añadir directamente a la harina. Dejamos reposar hasta que duplique el volumen y tenemos una masa madre. 

Agregamos el resto de harina, los huevos, la mantequilla derretida, el azúcar, el azúcar invertido, el agua de azahar, las ralladuras de los cítricos y la pizca de sal. Amasamos 3 min, vel espiga.

Retiramos la masa del vaso, pasamos a un bol engrasado y dejamos fermentar tapado con papel film hasta que doble su volumen.  

Pasado el tiempo, espolvoreamos la encimera de harina, espolvoreamos el rodillo y la masa si fuese necesario. Estiramos la masa con el rodillo dejandola fina y cortamos a cuadros de 14x10 cm. Con los recortes que queden, vamos juntando, estirando la masa, y recortando para hacer nuevos bollos y así hasta terminar la masa. En ellos vamos poniendo con la manga una tira de crema pastelera sin llegar al borde.

Doblamos los laterales para adentro. Plegamos la masa, sellando bien los bordes con pellizquitos para que la crema no se salga. Rodamos para dar forma de cilindro. Ver las fotos más arriba.

Colocamos los bollos sobre la encimera enharinada o sobre de papel de hornear. Tapamos con un paño limpio y dejamos reposar 30 minutos. Ponemos abundante aceite a fuego bajo para que se hagan bien los susos por dentro y no se quemen por fuera, ya que tienden a freirse enseguida.

Sacamos, escurrimos en papel absorbente para quitar el exceso de aceite y rebozamos en azúcar. Dejar enfríar, envolver en papel film para mantener tierno más tiempo.

Si preparáis más cantidad, se pueden congelar y sacar un rato antes de consumirlos y están como el primer día de tiernos.
    







 



2 comentarios:

  1. Hola guapísima !!!
    Me encantan las recetas con historia, y esta es una de ellas. Mira que los he comido veces, pero no sabía su origen, ya no se me olvida.
    Y bueno, la pinta de los tuyos está para que caigan unos cuantos sin contemplaciones, te quedaron escandalosos de ricos.
    Besotes mi niña.

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  2. Hola, Nuria. Curiosa la historia del suso, verdad!!. Te animo hacerlos, porque no es solo la pinta, están buenísimos.Gracias

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