TARTA FRÍA DE MOUSSE DE LIMÓN

Hoy les traigo una tarta que lleva años en mi recetario, fresquita y apetecible para el tiempo que nos entra, aunque cualquier temporada es buena para comerla. 

No necesita horno y es fácil de hacer. Hay muchas variantes de ésta clase de tartas, en cada casa se hace de diferente manera. Yo la suelo hacer tipo mousse, sin queso, ni requesón ni yogurt...queda muy fina al paladar, os encantará.

Ingredientes: 

-1 lata pequeña de leche condensada de unos 397 gr aproximadamente 
-500 ml de nata para montar 
-5 hojas de gelatina neutra 
-130 ml de zumo de limón 
-1/2 sobre de preparado de gelatina de limón para decorar 

Ingredientes para la base de la tarta: 

-20 galletas tipo María 
-30 gr de mantequilla 
-1/2 cucharadita de canela molida 
-3 cucharadas de algún licor o de leche si la van a comer los niños 

Preparación de la base: 

Se muelen las galletas, deben quedar bine fina. Derretir la mantequilla y mezclar con las galletas, incorporar la canela y el licor o leche, mezclamos bien. 

En un molde desmontable para tarta, ponemos un papel de hornear y encima vamos poniendo la base de galletas, aplanandola con una cuchara para que quede bien lisa. Metemos en el congelador que endurezca. 

Preparación del resto de la tarta:

Montamos la nata en un bol que debe estar bien fría, reservamos. 

Ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua, mientras tanto exprimos el zumo de limón, lo calentamos en el microondas, añadimos las hojas ya hidratadas y escurridas de agua, removemos con una cucharilla para que se disuelvan. 

En otro bol ponemos la leche condensada y añadimos el zumo de limón en el cuál hemos disuelto la gelatina, mezclamos bien. A continuación incorporamos la nata montada con movimientos envolventes con cuidado de que no baje la nata. 

Incorporamos a la base de galletas y lo metemos en el frigorífico unas horas hasta que cuaje. Una vez cuajada vamos con la preparación de la cobertura. 

Preparación de la cobertura: 

Calentamos el agua bien caliente, incorporamos el medio sobre de gelatina de limón, removemos bien hasta que la gelatina haya quedado bien disuelta. 

Dejamos enfriar y añadimos a la tarta por encima, siempre poniendo una cuchara en medio para que no haga agujero al caer el liquido. Metemos de nuevo al frigorífico hasta que cuaje la cobertura y lista para degustar.