Hoy os traigo una receta que puede tener cientos de años o más, guarda la esencia de lo antiguo. La cocinaba mi abuela y mi madre, y anteriormente me supongo que mis bisabuelas.
Es una receta típica de mi pueblo, una receta de aprovechamiento del pan del día anterior y como yo no tiro nada, me han educado con este lema, de vez en cuando la suelo hacer.
Estas recetas son joyitas que no deberían perderse, por eso voy a dejarla plasmada aquí y que pasen de generación a generación.
Ingredientes para 2 personas:
-250 gr de almejas
-150 gr de pan duro del día anterior
-2 tomates medianos
-1 pimiento verde
-1/2 cebolla grande o 1 pequeña
-2 ajos
-750 ml de agua
-75 ml de vino blanco
-pimienta
-1/2 pastilla de caldo de pescado
-sal
-aceite de oliva virgen extra "Oleoestepa"
Preparación:
Ponemos en un bol las almejas con agua, un chorrito de vinagre y sal. Las dejamos unos minutos, removemos bien para que suelten toda la arena. Pasado el tiempo las enjuagamos con agua clara, varios lavados.
Troceamos el pimiento, la cebolla, los ajos y el tomate, a trozos medianos, que se vea en la sopa.
Primero ponemos a sofreír en un poco de aceite de oliva, el pimiento, cebolla y ajos.
Cuando empiece a coger color añadimos el tomate, removemos y a la vez con la cuchara de madera vamos dando golpes al tomate, para que se deshaga un poco y suelte todo su jugo y sabor.
Ya todas las verduras sofritas, agregamos las almejas, sal y pimienta, las dejamos abrir.
Cuando empiece abrir las almejas, le vamos poniendo el pan en varias veces, y a la vez vamos removiendo.
Incorporamos el vino y dejamos que evapore el alcohol.
A continuación el agua y la pastilla de pescado. Bajamos el fuego al mínimo y dejamos cocinar unos 5 a 7 minutos, hasta que el pan ablande y quede tierno.
¡¡LISTO!!. Una sopa riquísima y muy sana de dieta mediterránea.
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