De probable origen árabe, en Antequera (ciudad de la provincia de Málaga), en el Convento de Clausura de Belén de las Monjas Clarisas, se elabora desde 1635 con la misma receta y se vende a los viandantes a través de un torno de madera.
Antequera, a pocos kilimetros de mi pueblo, unos 44, en 20 minutos me pongo allí por la autovía.
Me encanta, Antequera, es una de las ciudades más importantes de Andalucía, referencia constante
en la historia, el arte, la política, la cultura o la economía de
nuestra comunidad. La ciudad tiene numerosos restos arqueológicos de diversas épocas hallados en su territorio. Los Dólmenes de El Romeral, Viera y Menga, el Efebo de Antequera y otras muchas piezas que se encuentran en el Museo de la Ciudad son buena muestra de ello. Además de sus monumentos de interés y el auténtico monumento de la naturaleza, El Torcal, verdadera maravilla natural, declarado espacio protegido por la Junta de Andalucía y cuya visita parece obligada.
Os animo a visitar, Antequera y bueno, a lo que iba...os dejo la receta tradicional del bienmesabe. Seguro que os encantará.
Ingredientes:
-250 gr de almendras crudas
-425 gr de azúcar
-1 lata de cabello de ángel
-6 huevos
-250 ml de agua
-12 o 13 bizcochos de soletilla (en mi caso, depende del molde)
-canela molida
-azúcar glas, para decorar
Preparación:
Tostamos las almendras en horno o sartén. Yo lo suelo hacer en una sartén, es más rápido, pero tienes que estar removiéndo continuamente para que no lleguen a quemarse.
Una vez tostadas, las molemos, pero que no queden demasiado molidas, que se vean trocitos.
Con los bizcochos de soletilla, cubrimos el fondo de un molde cuadrado.
Vertemos el agua en un cazo y el azúcar, ponemos al fuego, cuando empiece a hervir dejamos unos 5 o 6 minutos, hasta conseguir el almíbar.
De éste almíbar reservamos algo más de la mitad y con el resto vamos pincelando los bizcochos.
A continuación cubrimos los bizcochos con una capa fina de cabello de ángel.
En el cazo del almíbar que tenemos reservado añadimos las almendras molidas y los huevos bien batidos, se mezcla bien y luego ponemos a fuego lento para que espese y se haga una masa. Repartimos esta masa por el cabello de ángel, cubriéndolo todo.
El último paso, es cubrir con una capa fina de canela y espolvoreamos con azúcar glas, para terminar decorándolo haciendo unas rayas de canela.
Además de poderlo preparar en un molde cuadrado, también se puede servir en una fuente o en raciones individuales en pequeños recipientes.
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