Hoy os traigo una receta de la cocina judía. Una receta muy parecida a la nuestra, la española.
Me encanta la comida judía y puede ser que me llame tanto la atención, porque al investigar un poco he comprobado que mi apellido Rengel es judío y viene de Alemania. Y es que los judíos llegaron a España durante la época romana. Se dice que un 25% de los españoles, tenemos origen judío y que descendemos de los sefarditas. Así qué, tengo ese gusaillo ahí de mi supuesta descendencia.
Ingredientes:
-4 pimientos grandes (2 rojos y 2 verdes)
-150 gr de tomates rallados
-1 cebolla grande morada
-1 diente de ajo triturado
-1 cucharada de zumo de limón
-1/2 cucharadita de pimentón dulce
-sal y pimienta
-aceite de oliva virgen extra
Preparación:
Lavamos los pimientos, secamos y ponemos en una bandeja de horno y horneamos sin aceite, ni nada, yo los pongo así y quedan muy bien.
Ponemos a 250º, 40 o 45 minutos hasta que la piel se tueste y separe.
Sacamos del horno, dejamos enfriar y quitamos la piel y las semillas. Yo reservo el jugo que suelta. Troceamos los pimientos a tiras.
En una sartén ponemos un poco de aceite y sofreímos la cebolla picadita. Cuando coja color añadimos el tomate rallado y el ajo triturado (yo majado) el zumo de limón, el pimentón dulce, sal, pimienta al gusto. Dejamos cocinar a fuego lento unos 10 minutos.
Añadimos los pimientos en tiras y dejamos cocinar otros 2 o 3 minutos. Yo le añado en este momento, el jugo reservado del asado de los pimientos y mezclo bien.
Dejamos enfriar a temperatura ambiente y servimos con pan tostado o como acompañante de carne o pescado.
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